El Gobierno emitió este jueves un Decreto Supremo que flexibiliza la cuarentena desde junio, autorizando la circulación de personas de cinco de la mañana a seis de la tarde, sin embargo, se permite también a municipios y departamentos que asuman sus propias restricciones en el marco de la norma nacional.
“Lo que dispone el Decreto es que se pueda circular entre las cinco de la mañana y las seis de la tarde. Al interior de este horario se da a las entidades territoriales autónomas, eso significa gobernaciones y municipios, la posibilidad de regular al interior de su propia jurisdicción según la situación que ellos tengan en cómo se va a trabajar en cada sector en particular”, explicó el ministro Óscar Ortiz.
La autoridad señaló que ya no estarían vigentes desde junio las restricciones de salida por número de carnet, dado que se podrá circular en el rango fijado sin autorización especial.
Aclaró que, de acuerdo con la evolución epidemiológica en las regiones, los gobiernos subnacionales pueden decidir volver a la cuarentena total a nivel municipal y departamental o, en otro caso, pueden incluso determinar el encapsulamiento de un distrito de una comuna.
Señaló asimismo que se permite la reactivación de las actividades económicas en horario continuo con medidas de bioseguridad, dentro del rango establecido, aunque las alcaldías y gobernaciones podrán establecer regulaciones adicionales para el funcionamiento del comercio, servicios y el transporte.

CONGELAN PAGO DE CRÉDITOS
El Gobierno también decidió este jueves, en Gabinete, ampliar por tres meses más el congelamiento en el pago de créditos para aquellas personas que tienen préstamos bancarios menores a un millón de bolivianos.
El ministro de Desarrollo Productivo, Óscar Ortiz, explicó que los prestatarios ya gozaban del diferimiento en las cuotas bancarias de marzo, abril y mayo, pero ahora quienes deben menos de un millón se beneficiarán del diferimiento durante junio, julio y agosto.
“En el tema crediticio, todos quienes deben menos de un millón de bolivianos, que también son la inmensa mayoría de quienes se han prestado del banco, van a tener tres meses más que sumados a los tres meses anteriores estarían los seis meses (de diferimiento) que se han comprometido”, manifestó Ortiz.
La situación de los créditos generó protestas de sectores como microempresarios, quienes argumentaron que no podrían pagar sus créditos desde junio, como había previsto la ASFI.
En sus protestas, los microempresarios exigieron cumplir la Ley 1294, la cual –en su interpretación- dispone el congelamiento de créditos durante la cuarentena y seis meses más. (Con información de ERBOL).