Hace cinco años una protesta en favor de sus colegas docentes no solo lo sacó de sus aspiraciones al rectorado, sino que sus adversarios la usaron para expulsarlo de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (UAGRM). Vicente Cuéllar, economista y abogado, favorito para ganar las elecciones del próximo 18, considera que en esa ocasión lastimaron como docente, persona y asestaron un duro golpe a su núcleo familiar, pero que “el tiempo de Dios es perfecto, ahora estamos en mejores condiciones que hace cinco años”. En un mano a mano con URBE.BO y Bolivia Noticias Urbe (Facebook) explicó en qué consiste la propuesta de cambio que impulsará en caso de ganar.
¿Se ha posicionado como el candidato del cambio, es tan grave la crisis en la universidad estatal cruceña?
Estoy convencidísimo de que en la UAGRM urge la necesidad de un cambio. Eso sí, creo que la transformación no es solo tarea de dos personas, sino de todos, porque la institución atraviesa una de las peores crisis de su historia, ya que antes eran académicas, económicas e institucionales, pero la de hoy es más profunda porque también hay una degeneración ética y moral.
¿Cómo así?
Después de 9 años de conducir la institución, las autoridades muestran claramente que anteponen sus intereses personales por encima de los colectivos. Hacer de todo para habilitarse a la reelección, reciclarse por afanes individuales, está en contra de la nueva visión que urge en la universidad. Miré en los 9 años que llevan al frente, las actuales autoridades, que insisten en quedarse, han manejado más Bs 14.000 millones. Han tenido un presupuesto anual que bordeó siempre $us 200 millones anuales, solo este año disminuyó, pero no mucho, pues está alrededor de los Bs 1.305 millones. Con esos números, podemos mostrar claramente que se ha vivido una época de gran bonanza y al mismo tiempo de despilfarro total. No tuvieron la capacidad de sentar las bases estratégicas para sobrellevar los momentos difíciles como el actual.
Tanto dinero
Y lo peor es que todos los proyectos implementados, solamente el 1,59% tienen que ver con temas de investigación. Imagínese, todo, pero absolutamente todo lo demás fue destinados al cemento y otras cosas que no acompañaron la formación académica. Pese a tener una infraestructura grande, consideramos que está vacía por dentro, se necesita llenarla con conocimientos, innovación y tecnología, que es lo que necesita el sector productivo de Santa Cruz, que produce el 74% de los alimentos que se consumen en el país. La universidad no ha venido acompañando el empuje regional, los esfuerzos que hacen los privados e instituciones públicas, cuando tendría que ser la orientadora de los grandes temas.


Aparece como uno de los favoritos a ganar en las diferentes encuestas, ¿cree en ellas o en que basa su optimismo?
He recibido con agrado y sorpresa apoyo de docentes y estudiantes, que pese a estar presionados por autoridades nos dicen que es momento de un nuevo liderazgo en la universidad. El 18 de agosto se cerrará un ciclo de nueve años, con autoridades que buscan perpetuarse, de crisis y de una mala conducción de la universidad. Estoy motivado y pienso que es bueno tener sangre nueva con ganas de transformar para bien.
¿Las encuestas anticipan que habrá segunda vuelta?
No soy partidario en las encuestas, pero siento que hay una gran cruzada por el cambio. Todos los días estoy intercambiando criterios con docentes, estudiantes y administrativos. Más de las encuestas, uno siente el apoyo mayoritario, confiamos que vamos a recibir el apoyo mayoritario, somos la única opción para un cambio responsable, con madurez, experiencia y haciendo participar a todos. Eso nos deja tranquilo y confiado que podemos ganar en la primera vuelta.
¿Tienen equipo para impulsar el cambio en caso de ganar?
Primero que yo tengo la capacidad y la experiencia requerida, he sido decano de la facultad de Ciencias Económicas, he trabajado en la banca y en empresas privadas y públicas. Puedo asegurar que mi currículum me avala para liderar un proceso de transformación. Pero al margen de ello, los dos candidatos (Reinerio Vargas, su acompañante de fórmula) tenemos un plan definido y un equipo de profesionales, que es la fortaleza de nuestro frente. Además, tenemos decidido involucrar a los profesores, universitarios y administrativos para que jueguen roles fundamental y protagónico en la reconfiguración de la universidad y en la sociedad.

Para transformar realidades se necesita tiempo, ¿cuáles serían sus medidas inmediatas en casos de llegar al rectorado?
Uno de los pilares de nuestra propuesta y gran desafío urgentes es recomponer las finanzas. En los primeros 100 días de gestión tendríamos que tener ya la universidad ordenada y encaminada la transparencia de los procesos administrativos y académicos a través de la digitalización. Queremos recuperar la palabra de la universidad en los temas fundamentales de Santa Cruz, dejaremos de ser una institución del silencio y defenderemos los principios democráticos por encima de cualquier interés. Se sobre entiende que los profesionales de la universidad son los mejores y deben jugar un rol protagónico a nivel regional.
Puedo resumir que desde el primer día buscaremos:
-Recomponer las finanzas
-Recuperar el rol protagónico
-Ponernos al día con la tecnología
-Garantizar el éxito académico de los estudiantes
-Garantizar la estabilidad del docente
¿Y es verdad que va dotar de tablets a los estudiantes?
Comprar para los tablets no es demagógico. La Unesco en su último informe, a través de la Comisión Académica, ha señalado que la educación es un derecho humano. Por lo tanto, las instituciones del Estado tienen que dar las condiciones para que los estudiantes de secundaria y universitarios tengan sí o sí conectividad.
Nuestra Constitución dice que la educación es gratuita y el Estado debe garantizar el acceso a la educación. Es obligación de las nuevas autoridades locales, departamentales y nacionales facilitar el internet. La Tablet es una parte, la conectividad es lo fundamental para acceder al conocimiento en tiempos de ecosistema digital y vamos a exigir que se cumpla.