La gestión municipal de Jhonny Fernández está políticamente herida de muerte. Así lo revela la última encuesta publicada por El Deber, donde el actual alcalde y excandidato presidencial apenas alcanza el 2,21% de la intención de voto. Es una caída estrepitosa desde el 3,89% que tenía hace apenas un mes. Más que un dato, es un veredicto ciudadano.
El excandidato a alcalde, Gary Áñez, fue claro en un editorial en su cuenta de Tik Tok: “Las encuestas no mienten. Santa Cruz ha aplazado con nota roja a Jhonny Fernández. Su gestión es un fracaso rotundo”.
Y la evidencia está a la vista de todos. Santa Cruz, una de las ciudades más dinámicas del país, vive hoy sumida en el desorden, el colapso urbano y la decepción social. El municipio que alguna vez fue vitrina de modernidad ahora es símbolo de improvisación y abandono, puntualiza Gary y enumera porque la gente lo aplaza al alcalde.
10 razones por las que Santa Cruz le dio la espalda a Jhonny
- Caos vehicular: El tráfico es incontrolable. No hay políticas viales, ni infraestructura acorde al crecimiento urbano.
- Ambulantes sin control: El espacio público ha sido cedido al desorden. Las aceras están tomadas.
- Calles destruidas: Los baches se multiplican y las obras prometidas no llegan.
- Basura acumulada: Servicios deficientes, mal manejo de residuos y una ciudad con focos de infección.
- Mafia gremial: El municipio tolera y convive con mercados ilegales y dirigentes intocables.
- Obras sin transparencia: Contratos sospechosos, adjudicaciones millonarias sin fiscalización ciudadana.
- Servicios básicos colapsados: Zonas sin agua potable ni saneamiento, pese a la millonaria inversión pública.
- Salud abandonada: Postas sin insumos, hospitales sin medicamentos, y personal sin respaldo.
- Expansión desordenada: Loteamientos ilegales, construcciones sin planificación, y caos territorial.
- Inseguridad en aumento: Robos, pandillas y una guardia municipal ausente.
A esto se suma un sentimiento generalizado de traición, señala y acusa a Fernández de usar la Alcaldía como plataforma política del MAS, de gobernar para intereses ajenos a Santa Cruz y de desmantelar la institucionalidad municipal en favor del clientelismo y la corrupción.
El rechazo va más allá de Santa Cruz
Los datos de la encuesta son lapidarios: mientras figuras como Jorge “Tuto” Quiroga y Samuel Doria Medina lideran la intención de voto nacional con 31,66% y 29,25% respectivamente, Jhonny Fernández cae hasta el séptimo lugar con un magro 2,21%, superado incluso por figuras con poca estructura nacional como Rodrigo Paz (3,36%).
Para Áñez, el desplome no es solo local, es nacional. Y la lectura es clara: el electorado está castigando la ineficiencia, el oportunismo político y la incapacidad de gestión.
El 3% no es solo una cifra. Es el símbolo de un ciclo agotado. Es la tumba política de un alcalde que prometió renovación, pero entregó retroceso. Porque cuando la ciudadanía se harta, también se levanta. Y Santa Cruz ya tomó nota.
