Un nuevo y violento episodio ligado al contrabando se registró la tarde del viernes en el sector de Cruce Lerco, departamento de Oruro. Dos patrullas militares que escoltaban un camión incautado con mercadería ilegal fueron emboscadas por al menos 25 vehículos y más de 60 personas armadas. Una de las patrullas fue incendiada, y un suboficial fue secuestrado durante el ataque.
El hecho fue confirmado por el viceministro de Lucha Contra el Contrabando, Luis Amílcar Velásquez, quien detalló que los uniformados pertenecían al Grupo de Reacción Inmediata (GRI) Lagunas 1 y al GRI Curahuara. Los militares estaban cumpliendo tareas de escolta y resguardo del camión cuando fueron interceptados por los contrabandistas, que con extrema violencia lograron incendiar el vehículo del GRI Lagunas 1 y llevarse al suboficial.
Horas después del secuestro, se activó un operativo de rescate encabezado por efectivos de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) Andina. El militar fue hallado en el sector Romero Pampa, sin su equipo de comunicación, sin sus botas reglamentarias ni su arma de dotación, una pistola SIG Sauer. Presentaba múltiples hematomas, lesiones en la cabeza y posibles fracturas costales.
Fue trasladado de urgencia al hospital de Patacamaya y posteriormente evacuado al hospital Arco Iris en la ciudad de La Paz, donde recibe atención médica especializada. Su estado de salud es delicado.
Asimismo, otros cuatro militares que integraban la patrulla incendiada sufrieron policontusiones y heridas de gravedad producto del ataque, y también fueron evacuados para su atención médica.
El viceministro Velásquez calificó el hecho como un “ataque criminal cobarde” y anunció que se reforzarán los operativos en la zona, además de iniciar las investigaciones para dar con los autores materiales e intelectuales del ataque.
El contrabando en zonas fronterizas continúa siendo una de las mayores amenazas a la seguridad del Estado boliviano, y este incidente refleja el creciente nivel de violencia de los grupos dedicados a esta actividad ilícita.
