En un acto de entrega de obras por más de Bs 24 millones en el departamento de La Paz, el presidente Luis Arce reafirmó la vigencia del Modelo Económico Social Comunitario Productivo (MESCP), defendiendo sus resultados y cuestionando duramente las propuestas de los candidatos de derecha que —según dijo— buscan restaurar el modelo neoliberal aplicado en Bolivia durante dos décadas.
“El pueblo tiene memoria, sabemos quiénes son”, advirtió el mandatario, en alusión directa a los exministros y actuales aspirantes presidenciales Samuel Doria Medina y Jorge Tuto Quiroga, protagonistas de las gestiones gubernamentales de los años 90, período que —a juicio del presidente— estuvo marcado por el desempleo, la pobreza y la entrega de empresas estatales a intereses privados.
Redistribución de la riqueza y gas domiciliario
Como prueba de que el MESCP continúa generando resultados concretos, Arce destacó la expansión de las redes de gas domiciliario como ejemplo de redistribución de la riqueza, algo —dijo— que no se logró en los gobiernos neoliberales.
“Nuestro modelo sigue vigente y sigue dando frutos para la población boliviana. Es falso el discurso que intenta instalar la derecha diciendo que está agotado”, sostuvo.
El modelo económico impulsado desde 2006, con la llegada del MAS al poder, se basa en la nacionalización de recursos estratégicos, la inversión pública y la participación activa del Estado en la economía, pilares que Arce considera fundamentales para sostener políticas sociales como los bonos y rentas.
Crisis de combustibles y bloqueo legislativo
Durante su intervención, el presidente responsabilizó tanto a la oposición parlamentaria de Comunidad Ciudadana y Creemos como al ala radical del MAS, identificada con Evo Morales, por obstaculizar la aprobación de créditos internacionales que permitirían financiar importaciones de combustible.
Esta situación, afirmó, generó escasez temporal y restricciones en la compra de carburantes, aunque aseguró que el abastecimiento interno está garantizado.
Además, lamentó que durante el gobierno de Morales no se hayan priorizado inversiones en exploración de gas, lo que derivó en un incremento de la dependencia de importaciones, que hoy superan el 80% del consumo nacional.
Exploración energética y autosuficiencia
Para revertir esa situación, Arce destacó que su gobierno ejecuta actualmente 44 proyectos de exploración hidrocarburífera y celebró el hallazgo del megacampo Mayaya en el norte paceño, que permitirá a La Paz recibir regalías por primera vez.
También subrayó el avance en la construcción de plantas de biodiésel, lo que —según proyectó— permitirá que Bolivia produzca hasta el 80% del combustible que consume.
“¿Quién ha generado esa nueva fuente de excedentes económicos para redistribuirlos? El Estado, a través de YPFB. Por tanto, nuestro modelo funciona”, afirmó.
Crítica a las propuestas opositoras
Arce cuestionó las propuestas económicas de los candidatos de derecha, quienes —según indicó— plantean el cierre o la privatización de empresas públicas como salida a la crisis. Recordó que ese modelo fracasó en el pasado, provocando protestas masivas que derivaron en la caída del neoliberalismo en 2005.
“El modelo de mercado, de privatizaciones, nunca funcionó en nuestro país”, afirmó. “Hoy gozamos aún de las ventajas del modelo económico boliviano, y eso la derecha no lo quiere escuchar”.
Finalmente, hizo un llamado a la población a “profundizar” el MESCP y consolidar los proyectos estratégicos en curso, como Mayaya y la producción de biocombustibles. “Debemos demostrar al mundo que Bolivia puede producir su propio combustible”, concluyó.