En medio de una intensa campaña electoral, hay figuras que, sin estar en la papeleta, juegan un rol fundamental. Una de ellas es Nidia Monje, esposa de Samuel Doria Medina, el candidato que actualmente lidera las encuestas. Economista de formación, madre dedicada y mujer boliviana comprometida, Monje ha sabido combinar su vida familiar con una visión clara sobre el país que sueña construir junto a su esposo.
Durante su participación en el programa Dueños de la Tarde con Ximena Zalzer, Nidia se mostró como una mujer segura, con ideas firmes y convicciones profundas. “Soy una mujer comprometida con su país y que sabe que tenemos una riqueza enorme que no hemos sabido aprovechar, y que es posible hacerlo”, afirmó.
Su historia con Samuel no es solo sentimental, también es intelectual y política. Ambos estudiaron economía, una decisión que, según ella, les permitió entender cómo funcionan los países y cómo se puede mejorar la calidad de vida de la gente. “Esa Nidia que tuvo sueños hoy coincide con el pensamiento que Samuel está llevando a cabo”, dijo.
A lo largo de las décadas en que Samuel lideraba empresas e inversiones, Nidia sostenía lo más esencial: la familia. “A mí me decían: ‘¿qué hacía Nidia mientras Samuel estaba en la gran empresa?’ Nidia estaba en la pyme, o sea, en la familia. El criar a los hijos te vuelve una persona que tiene que saber de todo un poco”, relató. Para ella, la formación de los hijos es una tarea estratégica: “Yo me ocupaba de formar esos recursos humanos que algún día en Bolivia van a servir”.
No se define solo como la esposa del candidato. Tiene pensamiento propio y quiere ejercer un rol activo, en caso de que Samuel llegue a la presidencia. Su objetivo: ser el puente entre el poder y la gente. “Yo quiero ser ese cable. Decirle: ‘A ver Samuel, esto está pasando, esto dice la gente’. Yo puedo ser ese enganche entre el ciudadano y el presidente”, explicó.
Cuando se le preguntó por el país que sueña, respondió sin titubeos:
“Un país donde los niños tengan la mejor educación, donde las madres no hagan fila para un hospital, donde no falten los medicamentos, donde se tenga derecho a una vivienda y a un trabajo generado por el sector privado, porque el gobierno solo crea burocracia”.
Con 48 años de relación —seis de noviazgo y 42 de matrimonio—, Nidia y Samuel han compartido no solo la vida, sino también un mismo proyecto de país. “Samuel siente que Bolivia le dio todo, y quiere devolverlo. Él siempre está viendo qué puede hacer por su país, se arriesga y se la juega por Bolivia”, expresó.

Cerró la entrevista con un mensaje que resume su compromiso como ciudadana y como compañera de vida:
“Si estás dispuesto a ser presidente de este país, vas a luchar y trabajar por mejores días para los bolivianos”.
Así, Nidia Monje se perfila como una figura clave en esta etapa electoral: firme, cercana, y con una visión de país que pone en el centro lo más esencial: la familia.
Fuente: Red Uno