El procurador general del Estado, Ricardo Condori, aseguró este viernes que el proceso penal en el caso denominado “Golpe de Estado I”, contra los excívicos, Luis Fernando Camacho y Marco Pumari, continúa su curso, pese a las decisiones judiciales recientes que beneficiaron a ambos acusados con medidas sustitutivas a la detención preventiva.
“No se debe malinterpretar, la cesación a la detención preventiva no implica que el proceso haya concluido o se haya caído. Estamos a una audiencia para que se dicte sentencia”, enfatizó Condori en declaraciones a medios.
Explicó que el Ministerio Público, la Procuraduría y otras partes acusadoras ya apelaron las recientes decisiones judiciales que favorecieron a los acusados, y que el proceso aún se encuentra en su etapa final.
“En el caso Golpe I, tenemos más de 400 pruebas documentadas, que acreditan los hechos y que apuntan a establecer la culpabilidad de los denunciados”, indicó.
Entre los elementos probatorios, el Procurador citó registros digitales en los que Camacho habría declarado haber “amarrado con policías y militares” para propiciar la salida del entonces presidente Evo Morales.
También señaló que Pumari habría utilizado vehículos policiales, solicitado cuotas de poder, como la Aduana.
Aclaró que el cambio de situación jurídica de los acusados -libertad pura y simple para Pumari y detención domiciliaria para Camacho- no afecta el fondo del proceso.
“Lo importante es que el juicio continúe hasta llegar a una sentencia, ya sea condenatoria o absolutoria. Nuestro objetivo es una sentencia condenatoria por los hechos registrados en 2019”, remarcó.
Apuntes
El Tribunal Sexto de Sentencia Anticorrupción de La Paz determinó el pasado martes medidas sustitutivas para ambos implicados. La decisión se dio en el marco de la revisión de detención preventiva ordenada por el presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Romer Saucedo.
El caso “Golpe de Estado I” investiga los hechos ocurridos entre el 20 de octubre y el 12 de noviembre de 2019, que derivaron en la renuncia del entonces presidente Evo Morales y la posterior posesión de Jeanine Áñez como presidenta transitoria.
Camacho y Pumari fueron parte activa de las violentas movilizaciones cívicas denunciando un supuesto fraude en las elecciones de 2019, apoyado en un informe de observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA) que fue puesto en cuestión por diversos expertos internacionales. /ABI/
