Durante el primer semestre de 2025, el riesgo país de Bolivia experimentó una leve mejora, aunque se mantiene como el segundo más alto de América Latina, solo por detrás de Venezuela.
Según un reciente informe de Bloomberg, basado en datos del banco JP Morgan, el indicador boliviano descendió a 1.877 puntos al cierre de junio, tras haber iniciado el año en 2.087.
El riesgo país es un parámetro clave para los inversionistas, ya que mide la probabilidad de que un Estado incumpla sus obligaciones financieras. A mayor puntuación, mayor es la percepción de riesgo. Pese a la baja registrada en los últimos meses, Bolivia continúa en una posición frágil dentro del contexto regional.
El reporte de Bloomberg atribuye esta leve mejora al repunte en los bonos soberanos bolivianos, cuyas cotizaciones subieron alrededor del 20 %. La publicación señala que esta tendencia responde, en parte, a las expectativas generadas por un eventual cambio de Gobierno, mencionando entre los posibles candidatos presidenciales a Samuel Doria Medina, Jorge Quiroga y Manfred Reyes Villa.
El economista Steffen Reichnold, citado en el informe, sostiene que existen “muchas posibilidades de un resultado político más positivo desde el punto de vista del mercado”, lo cual podría ayudar a corregir los desequilibrios macroeconómicos que enfrenta el país.
Pese a este leve descenso, Bolivia continúa siendo uno de los mercados más riesgosos de la región. Solo es superado por Venezuela, que encabeza la lista con 18.156 puntos. En contraste, otros países como Ecuador (814), Argentina (701) y El Salvador (413) presentan cifras significativamente más bajas.
El empresario y político Samuel Doria Medina también se pronunció al respecto a través de sus redes sociales este sábado:
“El riesgo país ha bajado un poco en estos días por la anticipación del cambio de gobierno que se viene. Aun así, Bolivia sigue siendo el penúltimo país más inseguro para la deuda. Cambiaremos eso resolviendo la crisis económica y reequilibrando la balanza de pagos en 100 días”.
Pese a los ajustes, la percepción de riesgo sigue elevada debido a factores como la escasez de divisas, el déficit fiscal, la incertidumbre política y el desgaste del actual modelo económico. Estas condiciones son observadas con atención por los mercados internacionales, especialmente ante la proximidad de los comicios de agosto.
Hasta el momento, el Gobierno no se ha pronunciado sobre el informe. No obstante, el viernes el Banco Central de Bolivia (BCB) atribuyó el repunte de los bonos a factores estrictamente económicos —como el incremento de reservas internacionales y el cumplimiento en el pago de la deuda externa— y negó que existan motivaciones políticas o electorales detrás del fenómeno.
📌 Fuente: La Razón