Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) despacha a diario 8,5 millones de litros de diésel y 7,7 millones de litros de gasolina, para reducir las filas en surtidores; sin embargo, hay una sobredemanda “descontrolada”, denunció este domingo el director de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), Joel Callaú.
“Hay días que se ha llegado hasta 8.500.000 litros en el caso de diésel y en caso de gasolina 7.700.000 litros de manera diaria cuando la demanda normalmente es 7 millones de litros en cada uno de los productos”, explicó en contacto con Bolivia Tv.
Afirmó que la ANH realiza los controles correspondientes a los despachos desde plantas de almacenaje de YPFB y a la distribución en el mercado interno y evidenció un abastecimiento normal.
Sin embargo, “la demanda no se está comportando de manera normal, tenemos picos y tenemos una sobredemanda que está claramente identificada, que está siendo de manera descontrolada afectando al usuario que realmente lo requiere “, denunció.
La ANH identificó que clanes familiares se dedican a hacer carguíos repetitivos, con mismos vehículos en diferentes estaciones de servicio, lo que realmente perjudica al usuario.
“Son vehículos que se dirigen a las diferentes estaciones y realizan un carguío repetitivo y un trasvasijado para revenderlo. Le denominamos un contrabando interno”, aseguró Callaú.
Añadió que por ejemplo en Cochabamba y Santa Cruz, esta semana, las filas en surtidores redujeron en un 75% y 60%, respectivamente; sin embargo, continúan, “debido a esta sobredemanda que lo único que hace es acopiar combustible para revenderlo y ellos está penado por ley.