El Segip – Servicio General de Identificación Personal (SEGIP) emitió un informe que complica la situación del futbolista Gabriel Montaño. Según la entidad, este jugador no cuenta con una tarjeta prontuario registrada en los archivos oficiales, un documento obligatorio para la emisión de la cédula de identidad en Bolivia.
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La ausencia de esta tarjeta prontuario, que incluye las huellas digitales del titular, evidencia posibles manipulaciones informáticas y el hurto del documento original para ocultar su verdadera identidad. Sin embargo, lo que genera aún más sospechas es que Gabriel Montaño logró renovar su cédula en 2021, un proceso que debería ser imposible sin los registros biométricos correspondientes.
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El informe del SEGIP señala que, aunque no existen registros bajo el nombre de Gabriel Montaño, sí se identificaron datos y huellas asociadas a una persona llamada Diego Hernán Montaño. Todo indica que este sería el verdadero nombre del jugador, lo que plantea serias dudas sobre la legitimidad de su documentación.
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Este caso podría derivar en sanciones severas tanto en el ámbito judicial como deportivo. La posible adulteración de identidad no solo representa un delito penal, sino que también podría descalificar al jugador de cualquier competencia oficial.
Las autoridades ya investigan cómo fue posible que un ciudadano accediera a renovar su cédula sin cumplir con los requisitos biométricos establecidos por ley. /Sucesos del Deportes/
