Por Hans Montaño, periodista
Diciembre reordena el tablero político en Santa Cruz de la Sierra. Mientras la ciudad transita entre el cierre del año y las expectativas propias de la Navidad y el Año Nuevo, la precampaña municipal comienza a mostrar señales claras de reconfiguración. En ese escenario, la figura de Carlos Manuel “Mamén” Saavedra emerge con una ventaja inicial difícil de ignorar: posicionamiento temprano, alta recordación y una narrativa que conecta con amplios segmentos del electorado urbano.
El dato no es menor. Una reciente medición de Captura Consulting ubica a Saavedra en el primer lugar de preferencia con un respaldo del 75%, un porcentaje que, más allá de su carácter preliminar, marca tendencia y condiciona al resto de los actores en competencia. La decisión anunciada de renunciar al Concejo Municipal para inscribirse formalmente como candidato —anticipada en una entrevista con el periodista Tuffí Aré— refuerza la percepción de coherencia política y determinación, dos atributos valorados en contextos de desconfianza hacia la clase dirigente.
La ventaja de Saavedra no se explica únicamente por los números. Su trayectoria como concejal opositor, sostenida en la fiscalización y la denuncia pública, le permitió construir una identidad reconocible frente a una gestión municipal cuestionada por ineficiencia, desorden urbano y reiteradas denuncias de corrupción. En un contexto de desgaste institucional, esa condición de opositor activo se convierte en capital político.
El escenario, sin embargo, es competitivo y fragmentado. A la contienda ingresan perfiles con distintos grados de experiencia, estructura y popularidad: Gary Añez, Angélica Sosa, Alfredo Solares y Juan Carlos Medrano, entre otros. Cada uno representa nichos específicos del electorado y expresa tensiones propias del ciclo político cruceño: continuidad versus recambio, gestión pasada versus promesa de cambio, estructura territorial versus viralidad digital.
El análisis del abogado y especialista en marketing político Arturo Mendívil Saucedo aporta claves para entender esta coyuntura. Según su evaluación, la elección se definirá por la capacidad de los candidatos para dominar cuatro factores decisivos: popularidad, comunicación, territorio y narrativa.
En ese marco, Saavedra parte con una ventaja objetiva: alta popularidad y la capacidad de haber generado un movimiento social alrededor de su mensaje, que interpela tanto a sectores populares como a clases medias urbanas. Su principal riesgo, advierte Mendívil, es convertirse en el blanco central de ataques y permitir que otros definan su identidad política antes de que consolide un proyecto propio.
Trayectoria institucional, gestión pública fundada en la meritocracia versus irrupción de popularidad entran a los debates impuestos. Este surgimiento de otras figuras políticas locales, rumbo a las elecciones subnacionales del 22 de marzo de 2026, como es el caso de Solares y los “curtidos” Gary Añez, Angélica Sosa o Juan Carlos Medrano, mueven el piso de los espacios municipales y también hay remezón por otros liderazgos y opciones en las gobernaciones departamentales.
En esta ciudad grigotana entre los protagonistas irrumpen nuevos personajes, apoyados por una popularidad trabajada en las redes sociales como TIK TOK y Facebook. En estos insurgentes campos digitales de la nueva batalla mediática, mandan los seguidores a conquistar.
Frente a este contexto, Mendívil Saucedo, explica que la elección será definida por la combinación de popularidad, comunicación, territorio y narrativa; donde el candidato que logre dominar estos cuatro factores se perfilará como el ganador.
En su análisis ‘Rumbo a las elecciones regionales’ aborda los comicios municipales de Santa Cruz de la Sierra, advirtiendo que el panorama electoral presenta elementos muy interesantes. Esta contienda inicia con distintos niveles de posicionamiento entre los candidatos, cada uno con fortalezas y desafíos particulares.
Entre los principales perfiles de competencia destaca el de ‘Mamén’ Saavedra, quien “inicia con alta popularidad y logró generar un movimiento social alrededor de su mensaje. Su posicionamiento conecta con distintos estratos sociales que ven en él una crítica al estado actual de las cosas. Hoy enfrenta un riesgo claro: es el blanco de ataques y buscan polarizar dentro de los temas tradicionales”. Afronta como desafío definir su propio movimiento antes de que otros actores lo definan por él.
También analiza a Gary Añez, como “una figura que desafió la permanencia tradicional en la política, algo que suele pasar factura con el tiempo. Sin embargo, Gary continúa vigente y parte con una ventaja decisiva: sabe comunicar. En política, quien comunica bien, hace llegar su mensaje”. Su desafío: romper el voto útil que podría arrastrar a otros candidatos.
Luego, a la exalcaldesa y concejal, Angélica Sosa. “Cuenta con una base territorial sólida, especialmente en distritos y barrios que aún mantienen su preferencia por su gestión pasada. Su mayor contraste es precisamente entre el municipio que dejó y la gestión actual”. Sosa enfrenta el desafío de demostrar con claridad cómo dejó el municipio versus la ineficiencia del actual alcalde.
Acerca de Alfredo Solares indica que este personaje surge desde la viralidad. “No posee estructura ni contenido programático sólido, pero su segmento principal proviene del votante que está dejando el MAS. Su desafío: construir contenido político, ideológico y formación para sostener su crecimiento.
Del actual presidente del Concejo, Juan Carlos Medrano, también considera que “su presencia es puramente viral, sin un nicho de votante definido. El segmento que podría haber captado ahora lo concentra Alfredo Solares. ¿Su desafío?: identificar y conquistar un nuevo electorado que le dé sostenibilidad.
Asimismo, Mendívil destaca que ante este panorama de emergencia de actores y liderazgos, también hay quienes vuelven a aparecer, se están reinventando y practicando un ‘reciclaje político’, como es el caso del alcalde Jhonny Fernández con sus ofertas de bono estudiantil de Bs 400 o el trámite gratuito para los vecinos viviendo en sus lotes sin documentos (Decreto Municipal de Certificación Técnica de Ubicación para Poseedores de Buena Fe). Fernández carga con una gestión ineficiente, plagada de corrupción y una ciudad mal proyectada
Entre consideraciones sobre las candidaturas, sostuvo que hay un nicho huérfano del 30 % que es del votante del MAS y UCS. “¿Quién va a asumir ese nicho porque recordemos que con Adriana Salvatierra como candidata, el MAS sacó dos concejales; (en su momento) fue una campaña pésima, pero obtuvo con el voto duro del MAS. Y está el voto de UCS”.
Señala la aparición de un tik toker (Alfredo Solares), haciendo una comparación con Jhonny Fernández, quien dos años antes de la elección usó su canal de televisión con campañas de solidaridad en los barrios, de fumigación o regalando sillas de ruedas y plata todos los días. “Entonces ahora aparece el señor Solares con solidaridad regalando distintas cosas, en un canal más barato y viral, TIK TOK, y apunta a ese nicho de votantes directamente”.
A su criterio, Medrano quedó más o menos huérfano en nicho electoral, quien se mantenía siendo concejal de oposición demostrando lucha y siendo un fenómeno de fiscalización, pero careciendo de estructura política, ideología, sin contenido sólido y sin definición de público objetivo porque estaba del lado de ‘Mamén’; después hizo un pacto con UCS y se queda sin nicho electoral porque “le dicen que es del MAS”. También fue candidato a vicepresidente con Manfred en una apuesta nacional donde se quiso reinventar, con un costo muy alto.
Enfatiza el virtual ganador en este escenario, con un perfil bueno: ‘Mamén’ Saavedra, pero en el transcurso de la campaña deberán observarse sus alianzas y candidatos a concejales, que podrían sumar o restarle votación.
En tanto que el planteamiento acerca de una polarización entre ‘Mamén’ y las restantes candidaturas cruceñas es descartada por el politólogo José Orlando Peralta. “Lo que sí existe es que él es un candidato opositor, es un competidor competitivo, es alguien que en su condición de concejal opositor y ha logrado destacar mediante la denuncia contra el oficialismo en las redes sociales”. Peralta considera que ‘Mamén’ realizó un trabajo comunicacional que ha podido llegar a diferentes sectores populares y de clase media en la ciudad de Santa Cruz, lo que lo ha posicionado con muchas posibilidades de ganar en 2026.
La fisonomía de esta ciudad, heterogénea en intereses y exigencias, requiere trayectoria o popularidad mediática en redes sociales para solucionar sus conflictos tradicionales, por ejemplo en el sistema municipal de salud pública o educación. Al respecto de esta afirmación, Peralta subraya que la trayectoria es una condición, no determinante, pero si condiciona conocer los problemas de la ciudad de Santa Cruz. “Y obviamente si se complementa con la popularidad para ganar una elección y tener legitimidad en las decisiones, eso sería lo ideal. Pero, una persona con trayectoria y popularidad no necesariamente siempre será un ingeniero o arquitecto, como era Percy Fernández, o el caso de equipos con gente técnicamente preparada. También puede tener trayectoria y popularidad una persona que no es técnico, pero conoce la ciudad”.
Según Peralta, en la política nacional se manejan bastante las emociones: una cosa es que la gente quisiera un candidato ideal, profesional y con capacidad de planificación; pero otra cuestión es lo que las personas sienten y ven en los postulantes, descartando la candidatura fría, sino que buscan a alguien cercano. En estos casos, muchas veces son candidatos que trabajan con su personalidad y popularidad, donde no necesariamente sean del área profesional y capacitados para manejar a un municipio tan grande y complicado como Santa Cruz de la Sierra.
Explica que Saavedra tiene el antecedente de trabajo como concejal en varias gestiones, mientras que Solares se presenta como hombre de las zonas periféricas. “Aquí no se trata de quién tiene más méritos tecnocráticos, sino de quién genera afinidad, emoción y cercanía con los sectores populares, con quienes son la mayoría del voto. Y esto no se trata de tener la mejor propuesta de planificación, sino tener más convicción y apoyo de la gente por la identificación que tienen con los candidatos”.
Exterioriza que ‘Mamén’, más allá de su apariencia o facha, ha sabido llegar a los sectores populares y también el precandidato Solares, que con su figura e historia de barrio quizás vaya a impactar a mucha gente. Peralta reflexiona que “muy probablemente” y con mayor intensidad en esta campaña política, ambos, ‘Mamén’ y Solares, tengan una disputa personal.
Administrar una ciudad ocupando espacios municipales demandan capacidad técnica, afirma Peralta; sin embargo “una cosa es la campaña en la cual estamos enfocados y entretenidos hasta el mes de marzo de 2026, cómo llegar a la gente para ganar el voto y que le den su apoyo, donde un discurso técnico frío quizás no sea la solución”. Pero, si alguien gana la elección, al siguiente día tiene que tener gente capacitada, no basta la trayectoria o popularidad si ya conoce los barrios. “Es necesario tener gente capacitada. Por eso estamos así. Tenemos una mentalidad tan caudillista en Bolivia que creemos que una sola persona va a solucionar todos los problemas. Aquí también debemos preguntarnos ¿con quién va ‘Mamén y Solares?, ¿quiénes están detrás?, porque muchos no aparecen”, remarca. Analiza que pasada la etapa de campaña, (como sucede con la mala administración del actual Gobierno Municipal), surgen personas capaces, pero no hay visión estratégica y se cometen errores. Sí supieron llegar a la gente – reconoce Peralta-. Y después esto tiene un costo. “Por tanto la situación es complicada. Una cosa es emocionar, como se plantea en comunicación política; y otra ya es administrar. Son momentos diferentes y aquí nada está garantizado, n
Frente a él, Gary Añez destaca por su habilidad comunicacional; Angélica Sosa por su base territorial aún vigente en determinados distritos; Alfredo Solares por una popularidad construida casi exclusivamente desde la viralidad en redes sociales; y Juan Carlos Medrano por una presencia mediática que, hasta ahora, no logra traducirse en un nicho electoral definido. Este mosaico confirma que la elección no será lineal, pero también que ninguno de estos perfiles arranca con el nivel de posicionamiento del que hoy goza Saavedra.
El politólogo José Orlando Peralta coincide en que no existe una polarización cerrada, pero sí reconoce en “Mamén” a un candidato competitivo, con un trabajo comunicacional eficaz que logró penetrar en sectores populares y de clase media. En una ciudad heterogénea como Santa Cruz de la Sierra, donde las demandas sociales conviven con expectativas de modernización y orden urbano, la combinación de trayectoria política y cercanía emocional resulta clave.
La política municipal, como subraya Peralta, se mueve más por emociones que por programas técnicos durante la campaña. El electorado no necesariamente busca al candidato ideal en términos profesionales, sino a quien le genere identificación, afinidad y esperanza. En ese terreno, Saavedra ha sabido capitalizar su imagen de concejal cercano, crítico y visible, sin quedar atrapado en un discurso excesivamente tecnocrático.
No obstante, la ventaja inicial no garantiza el triunfo. La conformación de alianzas, la selección de candidatos a concejales y la capacidad de proyectar un equipo técnico solvente serán determinantes para sostener la credibilidad más allá del discurso. La experiencia reciente del actual Gobierno Municipal demuestra que ganar una elección sin una visión estratégica ni cuadros capacitados tiene costos altos para la ciudad.
Aun así, el punto de partida es claro. En el inicio de la carrera hacia las subnacionales de marzo de 2026, “Mamén” Saavedra no solo lidera las encuestas: lidera el clima político. Conecta con el humor social, despierta simpatías y concentra expectativas en un electorado cansado de promesas incumplidas. La campaña recién comienza, pero hoy, con ventaja, es él quien marca el ritmo de la disputa por la Alcaldía de Santa Cruz de la Sierra.
