El candidato presidencial por Unidad Nacional (UN), Samuel Doria Medina, afirmó este fin de semana que la tendencia reflejada en las encuestas es “irreversible” y que su propuesta se consolida como la única capaz de sacar a Bolivia de la crisis. Lo dijo tras conocer los resultados de la Segunda Encuesta Nacional de Red Uno, que lo posicionan con el 19,6 % de intención de voto, por encima de los demás postulantes.
“Los bolivianos son más conscientes de quién puede sacarlos de este abismo”, expresó en un mensaje difundido por sus redes sociales, agradeciendo el respaldo de la ciudadanía y asegurando que la ola de apoyo a su candidatura “es imparable”.
Doria Medina subrayó que su campaña está basada en un plan económico concreto para reactivar la economía en 100 días, que incluye la eliminación de subvenciones insostenibles, el cierre de empresas estatales deficitarias y la conformación de un fondo de estabilización de $us 5.000 millones. “Contamos con un plan y lo implementaremos rápidamente, porque somos diferentes y haremos las cosas de manera distinta. Los bolivianos no pueden esperar más”, señaló.
En una entrevista con Infobae, el empresario explicó que su estrategia contempla restablecer relaciones diplomáticas plenas con Estados Unidos y mantener vínculos con países como China y Rusia, aunque descartó cualquier acercamiento con gobiernos autoritarios en Sudamérica.
También aseguró que su gobierno pondrá fin a la supuesta “cohabitación” con el narcotráfico. “Es imposible que los capos de la droga estén con identidad boliviana sin que las autoridades lo sepan. No seremos cómplices, vamos a trabajar con todas las policías del mundo, incluida la de Estados Unidos”, afirmó.
Sobre el litio, Doria Medina dijo que el país debe comenzar desde cero, con una nueva ley y procesos transparentes. En cuanto al medioambiente, aseguró que firmaría compromisos como el de Deforestación Cero 2030, pero advirtió que cuando exista una contradicción entre producción y conservación, dará prioridad a la producción responsable.
Consultado sobre por qué desea ser presidente, respondió:
“Para mí sería muy cómodo seguir siendo el empresario más grande y exitoso, pero de qué me sirve eso si el país se va a la quiebra. Yo tengo hijos y nietos en Bolivia y no los podría mirar a los ojos si no hago todo lo posible para resolver los problemas del país”.
Samuel Doria Medina, de 66 años, disputa por cuarta vez la Presidencia. A diferencia de anteriores campañas, esta vez se presenta como el principal favorito, con respaldo de sectores empresariales y una alianza legislativa con la agrupación Creemos, aunque aclaró que no compartirán responsabilidades en el Ejecutivo.
Con información de Red Uno e Infobae.
