El presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Romer Saucedo, afirmó este lunes que ha llegado el momento de poner fin al mandato de los magistrados “autoprorrogados” del Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP), a quienes responsabilizó de causar un profundo daño a la institucionalidad y la democracia bolivianas.
“Una de las instituciones que más le ha causado daño al país y su democracia es el Tribunal Constitucional Plurinacional, a través de los magistrados autoprorrogados. No podemos permitir que un puñado de personas destruyan la institucionalidad”, declaró Saucedo.
El titular del TSJ recordó que el Senado ya aprobó una ley para cesar el mandato de las altas autoridades judiciales prorrogadas, norma que ahora espera tratamiento en la Cámara de Diputados.
Saucedo fue enfático al señalar que los magistrados del TCP carecen de legalidad y legitimidad, y planteó dos salidas posibles:
“O renuncian inmediatamente a sus cargos porque no gozan de legalidad y legitimidad, o esperan ser expulsados como usurpadores de la Constitución y las leyes”, advirtió.
La permanencia de los magistrados del TCP, pese a la conclusión de su mandato en diciembre de 2023, ha generado una crisis institucional en el sistema judicial boliviano. Diversos sectores, tanto políticos como cívicos, han exigido su salida y la renovación del Órgano Judicial mediante elecciones, proceso que continúa paralizado desde hace más de un año.
Saucedo concluyó su pronunciamiento con un llamado a “recuperar la institucionalidad y el respeto al orden constitucional”, en un contexto de creciente presión pública y política para que se reactive la renovación del sistema de justicia en el país.
