La confrontación electoral subió de tono este miércoles con un fuerte intercambio entre el expresidente Evo Morales y el candidato presidencial Jorge “Tuto” Quiroga.
A través de su cuenta en la red social X, Morales lanzó duras acusaciones contra el exmandatario y actual postulante de Libre, a quien calificó como “ultraderechista, racista, agente de Estados Unidos, odiador y difamador serial”.
Morales aseguró que el gobierno del presidente Luis Arce “ha puesto al servicio del hijo del dictador Hugo Banzer –Tuto– todo el equipo de comunicación y redes de la Casa Grande, que se paga con los impuestos del pueblo”.
El exmandatario del MAS también afirmó que estas acciones buscan “tapar la escandalosa corrupción de los hijos de Arce Catacora” y que, como parte de un presunto acuerdo, Quiroga se comprometió a garantizar impunidad al entorno presidencial.
“Lucho ofreció a Tuto ejecutar, antes del balotaje, la segunda parte del Plan Negro contra Evo y los indígenas. Tuto prometió no tocar a los hijos corruptos de Arce y dejar escapar a sus ministros”, sostuvo Morales.
Frente a estas acusaciones, Tuto Quiroga respondió en declaraciones a la red Erbol, donde pidió que la campaña se concentre en propuestas y no en ataques personales.
“Me insultan todos los días en TeleSur, en Kawsachun Coca, yo no lloriqueo. Han gastado plata para destrozar a JP (Velasco). ¿Y lo han visto llorar a JP o al Tuto? No. Luchamos por Bolivia, porque la causa es salvar al país y no nos vamos a quejar”, manifestó desde Santa Cruz.
Quiroga insistió en que sus rivales políticos “están desesperados” y que en lugar de presentar soluciones a la crisis actual, “se dedican a insultar, difamar y mentir”.
En contraposición, aseguró que su propuesta se centra en la “autonomía total, la Bolivia digital, la revolución propietaria liberal y la estabilidad económica”.
La tensión entre ambos exmandatarios refleja el clima electoral cada vez más polarizado, en medio de acusaciones cruzadas de corrupción, guerra sucia y pactos políticos.