El empresario agropecuario y exlíder cívico Guido Náyar oficializó este viernes su candidatura a la Gobernación de Santa Cruz por la alianza Primero Santa Cruz, tras registrar su postulación ante el Tribunal Departamental Electoral (TDE). Con este acto, Náyar vuelve a la arena política luego de más de dos décadas alejado de cargos públicos, con un discurso que apunta a redefinir el rol del poder regional frente al Estado central.
En su planteamiento político, Náyar sostiene que Santa Cruz atraviesa una crisis de liderazgo institucional. “No tenemos gobernador, sino un prefecto obediente”, afirmó en referencia a Luis Fernando Camacho, a quien acusa de haber renunciado a la defensa firme de los intereses departamentales y de actuar en sintonía con el Gobierno del presidente Rodrigo Paz.
El eje central de su propuesta se presenta como un tratado político generacional, cuyo objetivo es construir un proyecto que funcione como instrumento de las nuevas generaciones. Según explicó, la iniciativa busca recuperar la vocación autonómica, el coraje político y la capacidad de gestión estratégica que —a su criterio— caracterizaron históricamente a Santa Cruz.
Náyar cuestionó la falta de exigencia del Gobierno Departamental en temas estructurales. Citó como ejemplo la postergación del compromiso de redistribución de recursos en una proporción 50/50 entre el nivel central y las regiones, promesa que —según recordó— fue parte del discurso de campaña y que no tuvo una respuesta institucional firme desde la Gobernación. Asimismo, criticó la ausencia de presión política para acceder a recursos extraordinarios tras las riadas que dejaron más de 20 personas fallecidas, especialmente para ejecutar obras de prevención y mitigación.
En esa línea, el candidato remarcó que su propuesta no se limita a la Gobernación, sino que apunta a una presencia territorial integral. Anunció que Primero Santa Cruz presentará candidaturas en los municipios y representantes a la Asamblea Legislativa Departamental de todas las provincias, con el objetivo de reconstruir un bloque político cohesionado que defienda el desarrollo regional.
Finalmente, Náyar sostuvo que Santa Cruz no puede continuar —según sus palabras— “postergada como lo ha hecho el MAS durante 19 años de Gobierno”, y llamó a encarar una nueva etapa política basada en liderazgo, institucionalidad y una relación más equilibrada con el poder central.
Con su inscripción oficial ante el TDE, Guido Náyar inicia formalmente su carrera electoral, posicionándose como una opción crítica tanto del oficialismo nacional como de la actual administración departamental, y proponiendo un nuevo contrato político entre liderazgo, territorio y generaciones emergentes.